SAHARA OCCIDENTAL
Historia Saharaui
En sus orígenes, el Pueblo Saharaui lo forman un sinfín de familias aglutinadas en tribus, procedentes en su mayoría de la región del Yemen, y que habitan desde siempre, la Región hoy denominada Sahara Occidental, territorio estratégico que limita con Marruecos, Argelia y Mauritania.
El Sahara Occidental es un territorio muy rico, ya que reúne un importantísimo yacimiento de fosfatos, bancos de pesca y yacimientos de petróleo, lo que unido a su estratégica posición en el mapa, explica la codicia de diferentes potencias por su anexión.
Cultura Saharaui
La cultura saharaui está basada en la transmisión oral, pasando de padres a hijos, a lo largo del tiempo, en forma de historias, poemas y canciones que no están escritas, manteniendo de esta forma vivas las tradiciones y las costumbres. Curiosamente, el éxodo y el exilio mantenido durante años, han hecho del Saharaui un Pueblo que guarda con celo el apego a sus raíces, a sus costumbres y tradiciones; y sin embargo, por otro lado, un pueblo moderno, permisivo y culto, que mantiene un equilibrio acertado entre la tradición más conservadora de los beduinos y la modernidad de cualquier otro pueblo más occidentalizado.
El exilio ha propiciado que el Pueblo Saharaui priorice la educación de sus jóvenes, existiendo universitarios prácticamente en todas las familias, lo que ha hecho que su evolución sea muy rápida, asumiendo de forma natural muchas de las costumbres e ideario “occidental”, en aquellos puntos en los que estuvieran más atados al pasado. Así, esta permisividad se refleja en la forma de vivir la religión, totalmente alejada del integrismo, en el papel que desempeña la mujer y su status en la sociedad, etc.
La Mujer Saharaui
La mujer tiene en la RASD un papel relevante, ya que el haber librado una guerra de casi veinte años, ha hecho que, mientras los hombres estaban en el frente, las mujeres tomaran las riendas de la organización y la vida diaria en los Campamentos. En todo caso, a pesar de que la RASD ha dado pasos importantes en este sentido y las mujeres se niegan a perder los privilegios conseguidos durante la guerra, lo cierto es que, debido a factores culturales, religiosos, etc., queda mucho camino por recorrer en el camino de la igualdad.